El internet of things va más allá de conectarse: se tiene que asegurar que la experiencia del consumidor sea relevante. Al considerarlo, las marcas deben implementar mecanismos que mejoren los resultados del cliente y sobrepasar la barrera de lo ordinario para trascender, gracias a una experiencia memorable que marque la diferencia entre determinada firma comercial y otras compañías que conforman el sector.

IOT se ha ido apoderando paulatinamente de diferentes productos, tales como los teléfonos inteligentes, las tabletas electrónicas e incluso el calzado deportivo. De hecho, al cierre de el año 2015 ya había un total de 1.11 millones de dispositivos conectados a internet en ciudades inteligentes. Y la cantidad va en asenso, ya que se indica que en 2016 se espera que existan 1.7 millones conectados a internet y 1.56 millones más para alcanzar los 2.67 millones en el año 2017.

En consecuencia, el valor de la inversión se comporta de forma similar a los productos que van adoptando internet of things. Tan sólo al cierre del año 2014, el monto apuntaba a los 601.2 mil millones de dólares y 743.1 mil millones al finalizar el año pasado. El tamaño el mercado se comporta de modo favorable, ya que entre el año 2015 y 2016 se estima un crecimiento de 174.1 mil millones de dólares para cerrar con 917.2 mil millones. Por consiguiente, entre el año 2016 y 2017 se predice un aumento de 213.1 mil millones, es decir un aumento de 39 mil millones.

Asimismo, entre el año 2017 y el 2018 se estima que habrá un aumento de 261 mil millones de dólares y entre el año 2018 y el año 2019 uno de 319.4 mil millones. Al considerar los resultados, el tamaño a nivel mundial de la adopción de internet of things va en ascenso, por lo cual cada vez mas firmas buscaran la forma de incorporarlo a los productos que comercializan.