Tanto en nuestro país como en Latinoamérica se ha visto una creciente incorporación de las TICs en diferentes industrias, empresas e instituciones en los últimos años. Sin embargo, en relación a lo que ocurre en el resto del mundo, su paso no ha sido lo suficientemente acelerado. Así lo ven, por lo menos, en la Asociación Chilena de Empresas de Tecnología de Información –ACTI–.

Jaime Soto, secretario general de ACTI apunta en una entrevista a Innovación & Mercado a que las autoridades públicas y privadas aún no incorporan este cambio como prioridad, incentivando el uso de las TICs a algunos segmentos que, a su juicio, son los únicos que pueden sacar un buen provecho. “Esto no es así, ya que la era digital en la que hoy vivimos está creando nuevas posibilidades en todo ámbito y, principalmente, moldeando el futuro y el desarrollo de Chile”, aclara en la publicación.

De todos modos, también indica que se están gestando algunas iniciativas, tales como el programa Agenda Digital, el Ministerio de Ciencias y Tecnología, la Ley de Protección de Datos Personales, proyectos que fomentan la creación de capital humano especializado y su consecuente aumento en los índices de I+D+i y más. No obstante, estas posibilidades aún no llegan a buen puerto y eso complica a la industria. “Están empezando a generar incertidumbre, sobre todo, porque fuimos partícipes de diversas mesas de trabajo público-privadas”, asegura.

Para algunas compañías de la industria, el que no haya un organismo que dé prioridad a este tema es una de las debilidades. En países como Colombia y Paraguay le han dado institucionalidad a nivel ministerial, por lo que la carencia de un Ministerio de Tecnología podría significar un atraso significativo en comparación con el resto de la región y a nivel mundial.

Por otro lado, también creen que las TICs forman parte esencial de la operación en las organizaciones productivas del país. No obstante, aún se observa en ciertas industrias una clara separación de las TICs para la Operación (OT) y las TICs para la administración y gestión (IT), cuando la tendencia global apunta a integrar estos dos ámbitos de tecnología, incorporando al desafío del CIO la gestión de parte del negocio a través de las tecnologías involucradas.

De todos modos, Jaime Soto resalta que es importante que en todas las industrias se estén adoptando a incorporar tecnología en sus procesos, incluyendo tendencias Big Sata, Analytics, Mobility, Social Media, Gestión Documental e Internet de las cosas, sobre todo en instituciones gubernamentales, las pymes y el sector salud, quienes son los que están más atrasados en la materia.